Efectos de la contaminación atmosférica y el cambio climático en la vegetación del PN de la Sierra de Guadarrama
EL OZONO, EL CONTAMINANTE DESCONOCIDO
LOS NIVELES DE OZONO EN LA SIERRA DE
GUADARRAMA TRIPLICAN LOS RECOMENDADOS
POR EUROPA para la protección de la vegetación
El Grupo de Ecotoxicología de la Contaminación Atmosférica
(GECA) del CIEMAT está estudiando el efecto de la
contaminación atmosférica en los ecosistemas de las cumbres
del Parque Nacional de Guadarrama. El ozono afecta al
crecimiento de los ecosistemas vegetales. Los pastizales de
cumbre con un alto valor ecológico soportan de forma crónica
niveles elevados de ozono troposférico y de depósito
atmosférico de nitrógeno considerados perjudiciales para los
ecosistemas.
El Ozono troposférico a nivel del suelo (O3), no confundir con la capa de ozono en la
atmósfera superior, es uno de los contaminantes que afecta a mayor número de
personas y es, además, uno de los más difíciles de combatir. Puede causar problemas
respiratorios, provocar asma, reducir la función pulmonar, originar enfermedades
pulmonares 1.
El ozono se forma por la reacción con la luz solar (fotoquímica) de contaminantes
como los óxidos de nitrógeno (NOx) procedentes de las emisiones de vehículos o la
industria y los compuestos orgánicos volátiles (COV) emitidos por la vegetación. Es por
ello por lo que los niveles de O3 más elevados se registran durante las horas diurnas y
especialmente en los meses estivales.
Resulta desconocido para el público general que las emisiones contaminantes
atmosféricas que se dan, por ejemplo, en las aglomeraciones urbanas o industriales
provocan impactos en zonas naturales alejadas de los mismos.
Después de años de estudio de los niveles de contaminantes atmosféricos en las
cumbres de las sierra de Guadarrama el grupo GECA del CIEMAT han comprobado que
los niveles de ozono exceden los límites para la protección de la vegetación.
1
Según Datos de la Organización Mundial de la Salud (http://www.who.int/es/news-room/factsheets/detail/ambient-(outdoor)-air-quality-and-health)
Paralelamente, el grupo realiza estudios de la sensibilidad de las especies a la
contaminación atmosférica, para ello se analiza la respuesta de la vegetación expuesta
a diferentes concentraciones de ozono y con diferentes niveles de disponibilidad de
nitrógeno en el suelo. Estos estudios se desarrollan en la instalación experimental de
cámaras de techo descubierto (OTC) que el CIEMAT mantiene en la Finca Agracia
Experimental La Higueruela (MNCN-CSIC). El ozono es un potente oxidante y provoca
numerosos efectos adversos en la vegetación como reducción del crecimiento de la y
de su capacidad reproductiva.
El grupo GECA del CIEMAT impartirá unas charlas, abiertas a todo el público
interesado, esta semana en Alpedrete (23 de noviembre a las 19 h Centro de Mayores)
y Segovia (22 de noviembre a las 19 h Centro San José) para exponer los resultados de
sus investigaciones, dentro del marco del Proyecto Concumbres llevado a cabo con el
apoyo de la Fundación Biodiversidad.
SOBRE GECA: cuenta con más de 20 años de experiencia en el campo de los efectos de la contaminación
atmosférica sobre los ecosistemas y agrosistemas mediterráneos y es pionera en el desarrollo de estudios
experimentales en este campo. A través de distintas encomiendas de gestión con el MITECO participa y coordina las
actividades de España en los Grupos de Trabajo sobre Efectos de la Contaminación Atmosférica en la Vegetación
(ICP Vegetation, ICP Modelling and Mapping) de la Convención de Naciones Unidas sobre Contaminación
Transfronteriza a Gran Distancia (CLRTAP- Convention on Long-range Transboundary Air Pollution, UNECE). El
conocimiento y las metodologías desarrolladas por esta Convención son empleados por la Unión Europea en el desarrollo de sus políticas ambientales relacionadas con la calidad del aire.